Iko hace un llamamiento a la afición para los dos partidos que quedan.
Primer año de vida del equipo sénior de Nuestro Abarán y llegamos a las dos últimas jornadas de liga con el equipo en aspiraciones de ascenso, ¿te lo esperabas a principios de temporada?
Iko, pensativo en el banquillo
Siendo sincero he de decirte que siempre he confiado en que el equipo se metiera entre los mejores. Era consciente de que era un equipo nuevo y muy joven pero sabía que con trabajo, ilusión y compromiso todo era posible y así ha sido. Además del objetivo del ascenso, al principio de temporada me marque otros que también lo consideraba importantes como era consolidarnos en la categoría, hacernos respetar por todos nuestros rivales y, sobre todo, recuperar la ilusión por el fútbol en nuestro pueblo y, en mi opinión, creo que lo hemos conseguido. Ha sido todo un sueño, en nuestro primer año, llegar a final de temporada con claras opciones de ascender. Ahora nos falta hacerlo realidad.
¿Ha sido difícil pasar de jugador a entrenador en tan poco tiempo?
Ha sido un paso más bien difícil, el fútbol siempre ha formado parte de mi vida como jugador y recuerdo que cuando me lo dejé lo pasé bastante mal. En esos momentos te vienen muchos recuerdos a la cabeza y te das cuenta de que ha llegado el fin a una etapa maravillosa de tu vida que nunca más podrás vivir. Empecé jugando al fútbol en la primera generación de alevines que hubo en Abarán, allá por el año 1990 y me lo dejé en la temporada 2010-2011. Ahora como entrenador, el fútbol me sigue dando vida pero es muy diferente a cuando eres jugador.
Sigues formándote como entrenador, ¿Cómo se compagina trabajo, entrenamiento y estudios?
Con mucho sacrificio y trabajo. A veces, me faltan horas a lo largo del día para terminar de satisfacer todas mis responsabilidades. La clave de todo está en la constancia, querer, ponerle ilusión a todo lo que haces y, sobre todo, saber organizar el tiempo del que dispones para poder hacerle frente a todo. Hay días que salgo de mi casa a las 8 de la mañana y llego a las 23:30. Desde que era muy joven, siempre he tenido integrado el valor de la responsabilidad y eso es lo que te lleva al éxito a la hora de conseguir lo que te propongas.
Eso es una demostración para las bases de que cuando uno hace lo que le gusta tiene tiempo para todo, ¿no crees?
En su etapa de jugador.
Por supuesto, cuando uno se organiza tiene tiempo para todo. A mis alumnos siempre les pongo el ejemplo de cuando yo jugaba en las bases. Recuerdo que por aquellos años salíamos del colegio a las 17 horas y entrenábamos, a lo mejor, a las 18:30. Al mismo salir del colegio merendaba, luego hacía mis deberes, posteriormente entrenaba y una vez que llegaba a casa me ponía a estudiar, no dejándolo todo para el último día. Ahora tienen tiempo de otras cosas menos provechosas y que a la larga traen esa falta de responsabilidad que hay hoy en día en algunos con sus deberes diarios. En definitiva, había cosas como el fútbol que nos encantaba pero había otras que aunque no nos gustarán había que hacerlas.
¿Qué te ha parecido la temporada de los equipos de base?
Me ha parecido bastante buena, han sido muchos los equipos que se han quedado en la parte alta de la tabla clasificatoria en sus respectivas categorías y eso es fruto del buen trabajo realizado desde todas las partes del club y, en particular, de sus entrenadores. Incluso los que no se han quedado en esa parte alta han realizado una extraordinaria temporada y, en mi opinión, sus entrenadores les han sacado todo el rendimiento posible a sus equipos. A estas edades, hay que tener los pies en el suelo e ir paso a paso. Los objetivos principales son, entre otros, que practiquen deporte, que se diviertan realizando su deporte favorito y formarlos como deportistas y buenas personas. Ahora toca seguir trabajando y mejorando día a día para ir creciendo como equipo. En estas edades el ganar o perder debe quedar en segundo plano.
Gestionar una plantilla donde todos los jugadores son amigos desde la infancia ¿es una ventaja o un inconveniente?
Por una parte es una ventaja y por otra un inconveniente. Cuando un entrenador coge a un equipo, lo primero que tiene que hacer es conocer a sus jugadores para saber de que dispone y que modelo de juego se adapta mejor a ellos. Yo personalmente esto me lo he ahorrado con algunos de los jugadores que forman la plantilla ya que han sido mis compañeros de vestuario durante muchos años. Por otro lado, podríamos llamarlo inconveniente aunque yo no lo llamaría así. Al principio de temporada, entre una de las tantas charlas que he tenido con ellos, dejé muy claro al vestuario que había que diferenciar entre nuestra vida personal y la futbolística. Tanto ellos como yo hemos tenido muy claro, en todo momento, cuales eran las facetas y responsabilidades que teníamos asignadas. Para mí ha sido muy difícil, a veces, tomar decisiones pero cuando uno es entrenador tiene que mirar por el equipo y no intereses personales. Me podré haber equivocado como se equivoca cualquiera pero siempre he intentado ser lo más objetivo con cada una de las decisiones que he tomado. Eso si, tengo que decir que estoy muy orgulloso y agradecido a todos y cada uno de los jugadores que han formado parte de esta plantilla. Sin su compromiso, sacrificio, esfuerzo, constancia y responsabilidad habría sido imposible haber llegado hasta el final de temporada jugándonos el ascenso ante grandes y buenos equipos. Hemos superado muchas adversidades a lo largo de la temporada, más de lo que algunos aficionados jamás pudieran pensar, pero ahí estamos, y eso es debido al gran espíritu de superación que hemos demostrado en esos malos momentos.
¿Cuál crees que es la categoría ideal para el Abarán?
Esta afición, este magnífico campo y este pueblo merecen tener un equipo como mínimo en 3ª División. El Abarán fue, es y lo SERÁ uno de los equipos más representativos de la Región y para ello se necesita la unión y el apoyo de todos los abaraneros y abaraneras.
¿Qué equipo ha sido la sorpresa de la categoría y cual la decepción?
La sorpresa de la categoría sin lugar a dudas ha sido el Soho-Mediterráneo y nosotros. Al principio de la temporada nadie contaba con nosotros y para muchos éramos una incógnita ya que no sabían como iba a ser nuestra nueva andadura por la categoría. Han sido muchos los entrenadores que nos han felicitado al término del encuentro y eso es un orgullo para el equipo. Estar luchando toda la temporada contra equipos de renombre en el fútbol murciano como el Ciudad de Murcia, Lorca Deportiva, Mazarrón, etc no ha sido nada fácil.
En cuanto a la decepción yo incluiría aquí al Lorca Deportiva y Mazarrón ya que eran equipos que disponían de una muy buena plantilla y en un principio estaban hechos para ascender. Eso dice mucho del nivel que este año ha habido en la categoría.
¿En qué entrenador te fijas por su metodología de trabajo y juego?
Respecto al aspecto personal, me gustan varios entrenadores como, por ejemplo, Simeone por haber sabido transmitirle y dado al equipo identidad, actitud y carácter. El equipo y sus jugadores, desde su llegada, son otros y eso habla muy bien de él.
También me gusta Pellegrini por ser todo un caballero y por esa humildad que tiene y demuestra tanto dentro como fuera de los terrenos de juego.
En cuanto al aspecto táctico y modelo de juego, me gusta mucho la metodología que llevan a cabo los técnicos del Borussia de Dormund y Bayern de Munich con sus respectivos equipos. Han realizado una temporada magnífica y esto no es por casualidad; son equipos donde todos sus jugadores se sacrifican mucho por el equipo y sus compañeros. Tácticamente están muy trabajados, tanto ofensivamente como defensivamente. De esto puedo estar hablando aquí un buen rato pero lo vamos a dejar para hablarlo personalmente cuando quieras. No procede meter un rollo ahora de conceptos tácticos.
¿Ha respondido la afición esta temporada?
A la afición siempre hay que estarle muy agradecido, si no fuera por ellos el fútbol no sería lo mismo. Ha habido partidos esta temporada en los que había más de 500 personas en el campo y eso es de agradecer. Al principio de temporada nadie se imaginaba que esto podría suceder. Pero también es verdad que ha habido partidos y fase de éstos, sobre todo en los que íbamos perdiendo, donde me hubiera gustado que el equipo se hubiera visto un poco más arropado por la afición.
Para terminar, me gustaría hacer un llamamiento a la afición para que esta semana se desplace hasta Beniaján para animar al equipo ante el transcendental enfrentamiento tenemos y que será decisivo de cara al ascenso tan ansiado que todos deseamos. Sentir el aliento de los tuyos en la grada es lo que nos dará la fuerza necesaria para sacar el partido adelante, el equipo se lo merece y estos jugadores también…
Iko, mucha suerte para los dos partidos que quedan y nos vemos este domingo en Beniaján.
Nuestro Abarán CF 